Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
Joven y Bella (Jeune & Jolie, Francia, 2013), la más reciente cinta de François Ozon, no es cualquier cinta erótica, llena de referencias lúdico-sexuales, como el propio cartel de la cinta nos pudiera significar, en realidad, el largometraje es una muestra de gran calidad estética en el plano visual, apuntalada con una visión sin tendencias doctrinales ni imposiciones morales, sobre el tema de las orientaciones sexuales.
El filme, divido en cuatro estaciones, comienza en el verano, cuando una chica de 17 años llamada Isabelle, interpretada de muy buena forma por Marine Vacth, experimenta las mieles de la sexualidad, sus primeras experiencias, mientras estudia.
Hasta aquí, el argumento parece un refrito de “Melissa P” (2006), el filme dirigido por Luca Guadagnino y protagonizado por María Valverde, sin embargo, el manejo de una doble vida en el cual, la chica se convierte en prostituta, viviendo un rol paralelo al de niña buena, resulta el elemento de tensión que le aporta un poco de emotividad al filme.
A pesar de la naturaleza tentadora del argumento, el filme resulta un tanto pesado, con aspectos que no fueron amarrados, como un forzado cambio de vida, que no tiene mucho sentido en la historia, y que además se deja sin aclarar.
Sencillamente es un argumento usado por Buñuel hace ya bastantes años en la fantástica “Bella de día”, en donde la hermosa y sensual Catherine Deneuve, nos deja claro, que su interpretación, el tema y estructura misma del propio filme, son prácticamente imposibles de superar.
En resumidas cuentas, la película no da mucho al análisis favorable, salvo por la parte estética, donde la fotografía de Pascal Marti, nos muestra planos poco usuales, que le dan un toque armónico a lo que estamos viendo en pantalla. Y para deleite de quienes aman la música, Phillippe Rombi y Françoise Hardy generan un ambiente agradable y emotivo al largometraje, con sus composiciones.
Una película que no recomiendo, pero citando a un amigo “se tiene que ver para experimentar la mala experiencia y afirmarla o para reclamar por la mala recomendación”.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o ingrese al sitio web www.inter-medios.jimdo.com